viernes, 15 de junio de 2012
El tránsito de Venus
Despues de su paso frente al Sol, todo fué transformandosé.
Venus irradió su escencia.
Suavemente. Sin sobresaltos. Como una caricia.
Líquida luz dorada que se cuela por los poros etéricos de este cuerpo de conciencia que es más allá de la carne, que está danzando en la carne.
Venus goteo su miel.
Dulcísima.
Dorada.
Divina.
Venus goteo su néctar sobre la tierra.
La llama Violeta
El rojo es la vida, el calor, la alegría, el humano la pasión, la tierra.
El azul es la verdad, el frío, la sabiduría, la divinidad, la claridad, el universo.
Cuando se abrazan, cuando se aman, cuando se hacen uno surge el violeta.
Violeta de integración.
Violeta de purificación.
Violeta de conciencia de la Unidad que Soy.
Detrás de ambos, superando la dualidad está el dorado.
Esa luz que es el Ser Iluminado. Brillando.
Arder en el fuego Violeta.
Ser trinidad.
Ser Unidad.
Ser.
Gracias Adamus.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)